La energizante luz del sol brillando sobre las hojas. El agua nutritiva empapando las raíces. El fertilizante rico en nutrientes que se esparce en las camas del jardín. Son muchas las cosas que ayudan a las plantas a crecer y prosperar.
En la base de todo está el suelo. Una buena tierra sienta las bases para el crecimiento saludable de las plantas. Pero, la mayoría de las veces, la tierra inalterada que se encuentra en su jardín no ha llegado a ser «buena» todavía. La mayoría de los suelos de los jardines no tienen la textura adecuada ni suficiente materia orgánica, como el compost o el estiércol, para que las plantas crezcan de forma eficaz.
Entonces, ¿cómo puede convertir el suelo actual de su jardín en una máquina de cultivar plantas rica en nutrientes? Siga leyendo para obtener una guía paso a paso para crear una buena tierra para el jardín.
Cómo hacer una buena tierra para el jardín (paso a paso)
Sin la mezcla adecuada de tierra debajo de ellas, las plantas tienen dificultades para crecer. Y en el peor de los casos, pueden morir por falta de materiales clave en el suelo. Ahorre tiempo, dinero y a sus plantas dándoles una buena base desde el principio.
Si nunca ha marcado su jardín para los servicios subterráneos, empiece por ahí. Para crear el suelo del jardín es necesario cavar en él con un motocultor o una pala, y ambas herramientas pueden dañar las tuberías subterráneas. Este importante paso le permitirá saber si necesita replantearse su lugar de plantación.
Ahora, los pasos para crear un buen suelo para el jardín:
- En primer lugar, analice su suelo con un kit de la oficina de extensión de su condado, si está disponible, o de su centro de jardinería local. Los análisis del suelo son el compañero de confianza del jardinero. Proporcionan información sobre la composición del suelo de tu jardín, la cantidad de materia orgánica que tiene actualmente y el pH del suelo. Saber estas cosas te ayuda a determinar los materiales que necesitas para que el suelo sea el mejor entorno para tus plantas.
- A partir de los resultados de las pruebas de suelo, decide la materia orgánica que utilizarás como aditivos para el suelo. También puedes iniciar una pila de compost por tu cuenta. Si el análisis del suelo muestra que el pH de tu suelo está desequilibrado, consulta con la oficina de extensión local.
- Comprueba el nivel de humedad de tu suelo antes de empezar. Coge un puñado de tierra y cierra la mano en un puño. Si la tierra se deshace entre los dedos, está bien; si se forma una bola, está demasiado empapada para trabajar con ella y necesita unos días para secarse. Nunca intentes trabajar con la tierra húmeda, ya que acabarás con un desastre compactado y atascado que no es bueno para plantar.
- Una vez que la tierra esté lista, elimina las malas hierbas y los restos del lecho del jardín.
- A continuación, es el momento de labrar. Empieza por una esquina del jardín y trabaja con tu motocultor eléctrico* hacia el otro lado, labrando a unos 25 cm de profundidad. Añade los materiales orgánicos y vuelve a labrar para mezclarlos.
- Por último, rastrilla el lecho del jardín para nivelarlo y riega bien la tierra.
*Una nota rápida: un motocultor eléctrico facilita mucho este trabajo, pero si no tienes uno, las herramientas de jardinería más prácticas también servirán. Utiliza el método de doble excavación para mezclar la tierra a mano si no tienes acceso a estas herramientas. Más información a continuación…
Método de la doble excavación (paso a paso)
- Esparce un poco de materia orgánica por el jardín. A continuación, cava un agujero de unos 10-15 centímetros de profundidad y aparta ese montón de tierra.
- Afloja la tierra del agujero con una horquilla de jardín, cavando otros 10 centímetros más o menos. espolvorea un poco de la materia orgánica.
- Cava un segundo agujero justo al lado del primero, y rellena el primero con la tierra del segundo.
- Afloja la tierra y añade materia orgánica al segundo agujero.
- Sigue cavando agujeros por el jardín siguiendo el mismo proceso: cava, rellena el agujero anterior, afloja y espolvorea. Cuando llegue al último hoyo al final del jardín, llénelo con la tierra del primer hoyo.
- Acabe el trabajo rastrillando y regando
Conociendo los diferentes tipos de tierra del jardín
La mayor parte de la tierra tiene el mismo aspecto, tanto si está extendida en un huerto como si está metida en una maceta. Pero, diferentes tipos de suelo tienen diferentes usos.
- La tierra vegetal es simplemente la capa superior del suelo que se encuentra en su jardín antes de mezclar la materia orgánica. Tiene una gama de texturas, desde la tierra de arena hasta la tierra de arcilla.
- La tierra de jardín suele referirse a la tierra vegetal que ha sido enriquecida con materia orgánica.
- La tierra para macetas es un poco engañosa, ya que en realidad no es tierra en absoluto. La base que se utiliza para las plantas en macetas es una mezcla de materiales aireados como el musgo de turba, la perlita y el polvo de corteza.
Suelo de jardín: consejos y trucos adicionales
El suelo compactado puede causar problemas al intentar establecer un nuevo jardín. Aquí se explica cómo deshacerse de la tierra compactada antes de que se convierta en un gran problema.