Cuidado de anfibios

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Nombres comunes

Tortugas bebé de orejas rojas y otros deslizadores, tortugas pintadas, tortugas de mapa, tortugas de estanque, etc.

¿Debo comprar una tortuga bebé?

No, probablemente no.

Las tortugas bebé son lo más lindo que hay, pero antes de llevar una a casa como mascota es importante considerar cuidadosamente su cuidado. Son animales longevos, a menudo viven más de 40 años. También crecen rápidamente y en un año necesitarán un acuario grande. Desgraciadamente, la mayoría de las veces la gente se encuentra con una tortuga bebé que fue vendida o regalada irresponsablemente sin pensar en el bienestar del animal a largo plazo o en lo que necesita y necesitará para vivir una vida sana en cautividad.

Tenga en cuenta que es ilegal comprar o vender tortugas acuáticas en los Estados Unidos que tengan una longitud de caparazón inferior a 4 pulgadas (10 cm) porque se cree que hay un mayor riesgo de que los niños se contagien de salmonela de las tortugas que pueden entrar en su boca. No es ilegal tener una tortuga bebé; simplemente no se pueden comprar ni vender.

Albergue

Un acuario estándar de 15 galones que mida 24 pulgadas de largo por 12 pulgadas de ancho por 12 pulgadas de alto (61 cm por 30 cm por 30 cm) es espacio suficiente hasta que una tortuga alcance una longitud de caparazón de unas 3 pulgadas (8 cm). Los acuarios más grandes son mejores y con un mayor volumen de agua, el acuario necesitará menos mantenimiento. Las «islas de tortuga» de plástico no son un alojamiento adecuado.

La profundidad del agua en el acuario debe ser mayor que la longitud del caparazón de la tortuga. La zona de agua puede filtrarse con un pequeño filtro eléctrico sumergible. El medio filtrante debe cambiarse con regularidad, tan a menudo como cada tres semanas, y si contiene una esponja, ésta debe enjuagarse cada semana.

Albergue para una tortuga pintada juvenil

Se puede utilizar una capa de grava de tamaño medio a grande en el fondo del acuario, pero es más fácil cambiar el agua si no se utiliza grava. En lugar de grava, pueden colocarse en el agua algunas rocas de río grandes y estables o trozos pesados de madera a la deriva para crear diferentes profundidades de agua. Las plantas artificiales pueden servir de escondite y decoración siempre que no contengan puntas afiladas y no puedan romperse o arrancarse fácilmente.

Sobre una pequeña zona de tierra que se incline gradualmente fuera del agua, suspenda una lámpara de calor para proporcionar un lugar de asoleo. Esto puede lograrse colocando una roca grande o un trozo de madera en la jaula para que se eleve gradualmente fuera del agua. Se pueden pegar trozos de pizarra u otras rocas planas con sellador de silicona apto para acuarios para crear también una plataforma estable para tomar el sol.

Cambie entre la mitad y dos tercios del agua cada una o tres semanas. Se pueden realizar cambios de agua más pequeños con mayor frecuencia, durante los cuales se aspira el exceso de comida y desechos del acuario con una aspiradora para acuarios. También se puede hacer una limpieza puntual con una jeringuilla después de la alimentación para ayudar a mantener el agua limpia.

La frecuencia con la que se cambie el agua depende del tamaño del acuario, de la cantidad de agua que contenga y del número de tortugas que se tengan. Si hay un gran volumen de agua, se utiliza un buen filtro y sólo se tiene una tortuga, el agua no tendrá que cambiarse tan a menudo como en un acuario pequeño sin filtración y con múltiples tortugas, que podría necesitar cambios de agua diarios.

La mayor parte de los residuos que producen las tortugas acuáticas es el exceso de comida. Para combatir esto, algunas personas optan por alimentar a las tortugas acuáticas con alimentos desordenados (lombrices de tierra, pellets de tortuga, grillos, etc.) en un recipiente separado fuera de la jaula para reducir la cantidad de exceso de comida en el tanque.

Iluminación

Las tortugas acuáticas requieren dos tipos diferentes de iluminación. Se requiere una bombilla fluorescente u otra iluminación que produzca un «5%» o más de radiación UVB cuando las tortugas se mantienen en el interior. La bombilla que produce UVB debe colocarse sobre el área de asoleo y a menos de 12 pulgadas (30 cm) de ella. También debe colocarse sobre una cubierta de pantalla o un área abierta en lugar de una cubierta de vidrio o plástico del acuario. La cantidad de radiación UVB que produce una bombilla desaparece lentamente con el tiempo, por lo que es necesario reemplazarlas una o dos veces al año.

Una de las razones más comunes por las que las tortugas bebé mueren es porque su caparazón se «ablanda». Las tortugas acuáticas y muchas otras especies diurnas de reptiles necesitan los rayos UVB para procesar el calcio de su dieta. Sin la cantidad y el tipo adecuados de radiación ultravioleta (UV) y la dieta correcta, el nivel de calcio en la sangre bajará demasiado. Cuando esto sucede, las tortugas empiezan a tomar calcio de otras partes del cuerpo (el caparazón, por ejemplo) para mantener el nivel de calcio en la sangre lo suficientemente alto como para seguir adelante, pero finalmente esto conduce a la muerte.

Una tortuga juvenil tomando el sol en una plataforma fuera del agua. La temperatura y la iluminación son las dos partes más importantes del cuidado de las tortugas que hay que tener en cuenta.

El segundo tipo de iluminación que necesitan las tortugas acuáticas es un foco incandescente para crear calor para una zona de asoleo en la jaula. Las bombillas estándar se pueden utilizar para este propósito, de lo contrario las bombillas especiales de haz apretado para reptiles se pueden comprar en la mayoría de las tiendas de mascotas y funcionan bien. La potencia que se necesita para crear un punto de asoleo a la temperatura correcta dependerá de la altura de la bombilla con respecto a la plataforma de asoleo, de la temperatura ambiente de la habitación en la que se mantiene a la tortuga y de la especie de tortuga que se mantiene.

Temperatura

Diferentes especies de tortugas pueden tener diferentes requisitos de temperatura. La mayoría estará bien con una temperatura del agua que oscile entre los 24-27°C (75-80°F), aunque puede ser necesario ajustar esto para algunas. Puede utilizarse un calentador de acuario sumergible para calentar el agua. Hay que tener cuidado de colocar el calentador de forma que no sea probable que las piedras se caigan o sean empujadas sobre él y puedan provocar la rotura del cristal. Utilizar un calentador sumergible de titanio o plástico es aún más seguro.

La zona de asoleo en tierra debe permanecer entre 90°F (32°C) y 100°F (38°C). Utilicé una bombilla de 50 vatios colocada a unos 15 cm (6 pulgadas) por encima del lugar de asoleo para lograr esto, pero puede ser diferente en otras situaciones. Si la temperatura del agua o el punto de asoleo no son lo suficientemente cálidos, las tortugas jóvenes pueden negarse a alimentarse o parecer letárgicas e inactivas. Utilice un termómetro preciso para medir la temperatura tanto en el agua como en tierra.

Dieta

Ofrecer a las tortugas acuáticas una dieta variada y nutritiva es la clave del éxito a largo plazo. Al contrario de lo que muchos recomiendan, es mejor que los pellets de tortuga no constituyan toda la dieta de las tortugas acuáticas.

Las tortugas juveniles son generalmente más carnívoras que las adultas, aunque algunas especies como las tortugas pintadas seguirán consumiendo una cantidad razonable de vegetación mientras son jóvenes. Pueden ofrecerse pellets de tortuga acuática de pequeño tamaño, lombrices de tierra vivas, grillos, orugas nocturnas picadas, gusanos negros, gusanos tubifex, krill pequeño liofilizado, gusanos de cera y guppies alimentadores para satisfacer sus necesidades dietéticas carnívoras. También debe ofrecerse diariamente berza, nabo, diente de león, mostaza, lechuga romana, lechuga roja, col rizada, plantas acuáticas como Elodea y otras verduras. De vez en cuando también puede ofrecerse zanahoria rallada o boniato. La lechuga berg, las espinacas y las hojas de ruibarbo no deben darse de comer a las tortugas.

No es raro que las tortugas jóvenes ignoren las plantas y otras verduras, pero aun así deben ofrecerse con regularidad para asegurarse de que estén disponibles cuando la tortuga empiece a comerlas.

Si su tortuga no está comiendo, compruebe primero las temperaturas del acuario con un termómetro preciso. Si las temperaturas están en un rango adecuado, intente ofrecer gusanos negros vivos o lombrices de tierra picadas, que pocas tortugas pueden resistir. Algunas tortugas pueden no alimentarse mientras están siendo vigiladas, especialmente si son nuevas, y puede llevar algún tiempo hasta que se acostumbren a su entorno.

La suplementación adecuada de calcio y vitaminas es fundamental y es una parte del cuidado de las tortugas acuáticas que a menudo se pasa por alto. Una buena manera de suministrar suplementos a las tortugas es hacer rodar una lombriz de tierra o una oruga nocturna picada en un suplemento para reptiles en polvo y luego ofrecérselo a la tortuga con pinzas para evitar que el calcio o las vitaminas se desprendan en el agua. Utilice un suplemento que contenga calcio con vitamina D3 junto con un suplemento multivitamínico de alta calidad.

Las tortugas jóvenes pueden ser alimentadas con tres u ocho pellets de tortuga una o dos veces al día, junto con un trozo grande de una lechuga oscura u otra verdura de hoja verde flotando en el agua. Se pueden sustituir los pellets de tortuga por otros alimentos varias veces por semana. No coloque la comida en tierra, simplemente échela al agua y retire todo lo que no se coma en un par de horas.

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