- ¿Tienes una llaga roja y dolorosa en la comisura de la boca? Podría ser queilitis angular
- La queilitis angular se confunde a menudo con un herpes labial o unos labios agrietados, pero suele estar causada por un hongo
- Lamerse en exceso puede contribuir a la aparición de la queilitis angular
Si tienes los labios secos y agrietados, y frotarte con un lápiz de labios no funciona, entonces el culpable podría no ser unos labios agrietados. Podría tener una afección cutánea que la mayoría de la gente desconoce: la queilitis angular.
«La queilitis angular es una afección cutánea que provoca una inflamación dolorosa en una o ambas comisuras de la boca», dice la doctora Sonia Batra, dermatóloga y copresentadora del programa de televisión The Doctors. Batra estima que la queilitis angular afecta a alrededor del 0,7% de la población, por lo que, aunque no es exactamente súper común, tampoco es rara.
¿Qué causa la queilitis angular?
Básicamente, la queilitis angular está causada por la acumulación de saliva en las comisuras de los labios, lo que puede hacer que se resequen y agrieten. «Cuando la saliva descompone e inflama la piel de las comisuras de la boca, los parches inflamados pueden ser colonizados por bacterias o levaduras que suelen residir en la boca», dice Batra.
La inflamación y el agrietamiento en las comisuras de la boca pueden provocar dolorosas llagas. «Como resultado, esto puede dificultar la apertura de la boca y algunos pueden experimentar una sensación de ardor en los labios o la boca», dice Batra. En los casos más graves, algunas personas pueden experimentar un mal sabor de boca o dificultad para comer, sobre todo si la irritación se convierte en ampollas abiertas y sangrantes.
A menudo, las personas se lamen los labios para tratar de aliviar el dolor, pero esto puede empeorar la situación. «Hacerlo provoca una mayor acumulación de saliva, lo que crea un entorno ideal para que crezcan las bacterias o un hongo como la levadura», dice.
La queilitis angular se confunde a menudo con el herpes labial, pero hay una diferencia fundamental, dice Batra: «Visualmente, la queilitis angular aparece en la esquina de la boca como piel agrietada y escamosa, mientras que el herpes labial puede aparecer en cualquier parte de la boca. Por lo general, parece un grupo de pequeñas ampollas que se convierten en una costra en el transcurso de días», dice.
«Además, el herpes labial tiene ciclos de vida, por lo que a menudo se siente un ardor o picor en una zona determinada del labio antes de que se forme una ampolla. La queilitis angular no presenta signos de advertencia hasta que aparece una llaga».
¿Quién está en riesgo?
Bueno, todo el mundo, pero algunas personas son más susceptibles a la queilitis angular que otras. Por ejemplo, si tiene líneas profundas alrededor de las esquinas de la boca (también conocidas como «líneas de marioneta»), es más probable que la saliva se acumule en esas hendiduras más profundas, lo que le hace correr más riesgo de inflamación.
La queilitis angular también es más común en personas con aftas orales recurrentes (manchas blancas esponjosas en la lengua o en el interior de las mejillas) debido a un desequilibrio de un hongo llamado Candida, que puede ser causado por una inmunodeficiencia o por el uso frecuente de corcitosteroides o antibióticos, dice Batra.
Los fumadores, las personas con aparatos ortopédicos y las personas con piel sensible también son más vulnerables a las infecciones por hongos. También es especialmente frecuente en los ancianos: «las personas mayores suelen tener un exceso de saliva debido a las prótesis dentales, la pérdida de dientes y las deficiencias vitamínicas que aumentan su riesgo», afirma Batra.
Ciertas afecciones médicas, como la anemia, la diabetes, los trastornos inmunitarios y algunos cánceres, suponen un riesgo de padecer queilitis angular.
¿Es la queilitis angular contagiosa?
A diferencia del herpes labial, la queilitis angular no es contagiosa según la clínica dental Fallbrook Smiles. La condición puede extenderse al otro lado de la boca, sin embargo no es probable que se extienda a otras áreas de su cuerpo.
Cómo tratar la queilitis angular
«Si desarrolla queilitis angular, mantenga la zona inflamada limpia y seca para evitar que la infección empeore», dice Batra. «Su médico también puede recetar una crema tópica con esteroides para promover la curación». En los casos más graves, el médico puede recetar antibióticos o medicamentos antimicóticos.
Si la llaga es relativamente leve, también puedes curarla con algunos trucos caseros, como aplicar bálsamo labial, vaselina o aceite de coco para calmar e hidratar las zonas irritadas, dice Batra. Pero ten cuidado: si no se trata, la infección podría empeorar y extenderse a la piel circundante o causar aftas orales.
Para prevenir la aparición de la queilitis angular, manténgase hidratado, mantenga los labios secos, aplique regularmente lápiz de labios y practique una buena higiene bucal, dice Batra. Además, deja de lamerte los labios, porque no sólo esparces saliva, sino que además tiene un aspecto increíblemente asqueroso.