Investigación que estamos observando
Una vacuna utilizada desde hace tiempo se muestra prometedora para ayudar a restaurar los niveles de azúcar en sangre casi normales en personas con diabetes tipo 1 avanzada. Investigadores de la Escuela de Medicina de Harvard inyectaron a adultos que padecían diabetes tipo 1 dos dosis de la vacuna del bacilo de Calmette-Guérin (BCG), que se utiliza tradicionalmente para prevenir la tuberculosis.
Los participantes en el estudio, todos ellos con diabetes tipo 1 durante muchos años, mostraron mejoras significativas en sus niveles medios de azúcar en sangre tras la vacunación. Las mejoras duraron los cinco años siguientes. Los investigadores afirmaron que parece que la vacuna afectó a un mecanismo metabólico que aumenta el consumo de glucosa por parte de las células.
Se sabe que esta vacuna en particular ya es beneficiosa para potenciar una sustancia del organismo que ayuda a desactivar los ataques de las células inmunitarias a los tejidos sanos, que se producen en los individuos con enfermedades autoinmunes, como la diabetes de tipo 1.
Se realizarán más estudios para confirmar los resultados y explorar la posibilidad de utilizar la vacuna para tratar también a las personas con diabetes de tipo 2.