Tesla fue fundada en 2003 por un grupo de ingenieros que querían demostrar que la gente no tenía que hacer concesiones para conducir vehículos eléctricos: que los vehículos eléctricos pueden ser mejores, más rápidos y más divertidos de conducir que los coches de gasolina. En la actualidad, Tesla no sólo fabrica vehículos totalmente eléctricos, sino también productos de generación y almacenamiento de energía limpia infinitamente escalables. Tesla cree que cuanto antes deje el mundo de depender de los combustibles fósiles y avance hacia un futuro sin emisiones, mejor.
El Roadster, lanzado en 2008, dio a conocer la tecnología de baterías y el tren motriz eléctrico de vanguardia de Tesla. A partir de ahí, Tesla diseñó el primer sedán premium totalmente eléctrico del mundo, el Model S, que se ha convertido en el mejor coche de su clase en todas las categorías. Combinando seguridad, rendimiento y eficiencia, el Model S ha reajustado las expectativas del mundo para el coche del siglo XXI con la mayor autonomía de cualquier vehículo eléctrico, actualizaciones de software por aire que lo mejoran con el tiempo y un tiempo récord de aceleración de 0 a 100 km/h de 2,28 segundos medido por Motor Trend. En 2015, Tesla amplió su línea de productos con el Model X, el vehículo utilitario deportivo más seguro, rápido y capaz de la historia, que cuenta con calificaciones de seguridad de 5 estrellas en todas las categorías de la National Highway Traffic Safety Administration. Completando el «Plan Maestro Secreto» del CEO Elon Musk, en 2016, Tesla presentó el Model 3, un vehículo eléctrico de bajo precio y gran volumen que comenzó a producirse en 2017. Poco después, Tesla desveló el camión más seguro y cómodo de la historia, el Tesla Semi, que está diseñado para ahorrar a sus propietarios al menos 200.000 dólares a lo largo de un millón de kilómetros solo en base a los costes de combustible. En 2019, Tesla desveló el Model Y, un SUV de tamaño medio, con asientos para hasta siete personas, y el Cybertruck, que tendrá mejor utilidad que un camión tradicional y más rendimiento que un coche deportivo.
Los vehículos Tesla se producen en su fábrica de Fremont, California, y en la Gigafactory de Shanghái. Para lograr el objetivo de tener las fábricas más seguras del mundo, Tesla está adoptando un enfoque proactivo en materia de seguridad, exigiendo a los empleados de producción que participen en un programa de formación de varios días antes de poner un pie en la fábrica. A partir de ahí, Tesla sigue impartiendo formación en el puesto de trabajo y haciendo un seguimiento diario del rendimiento para poder mejorar rápidamente. El resultado es que el índice de seguridad de Tesla sigue mejorando mientras la producción aumenta.
Para crear todo un ecosistema de energía sostenible, Tesla también fabrica un conjunto único de soluciones energéticas, Powerwall, Powerpack y Solar Roof, que permiten a los propietarios de viviendas, empresas y servicios públicos gestionar la generación, el almacenamiento y el consumo de energía renovable. Como apoyo a los productos de automoción y energía de Tesla se encuentra Gigafactory 1, una instalación diseñada para reducir significativamente los costes de las células de las baterías. Al llevar la producción de células a la empresa, Tesla fabrica baterías en los volúmenes necesarios para cumplir los objetivos de producción, al tiempo que crea miles de puestos de trabajo.
Y esto es solo el principio. Con la construcción de su coche más asequible hasta la fecha, Tesla sigue haciendo que los productos sean accesibles y asequibles para un número cada vez mayor de personas, acelerando en última instancia la llegada del transporte limpio y la producción de energía limpia. Los coches eléctricos, las baterías y la generación y el almacenamiento de energía renovable ya existen de forma independiente, pero cuando se combinan, se vuelven aún más poderosos: ese es el futuro que queremos.