Ningún grano o espinilla dura para siempre. Sin embargo, los granos y espinillas pueden ser increíblemente obstinados y persistentes. Si estás luchando con granos que no desaparecen, es hora de un nuevo enfoque. Con el tratamiento adecuado, el acné crónico puede controlarse.
Tratamiento del acné en casa
Paso nº 1: No te escarbes ni revientes los granos. Aplicar presión a su piel irritada probablemente empeorará las cosas, no las mejorará. De hecho, es una buena idea mantener las manos alejadas de la cara.
Revisa tu rutina de cuidado de la piel. Lávate la cara dos veces al día (por la mañana y antes de acostarte) y cuando esté visiblemente sucia. Utiliza un limpiador suave sin aceites; elige uno que diga «no comedogénico», «sin aceites» o «no obstruye los poros» en la etiqueta. Sécate la cara y luego aplica una fina capa de medicamento para el acné de venta libre (OTC) en toda la piel propensa al acné.
Muchos medicamentos para el acné de venta libre contienen peróxido de benzoilo, un antiséptico que mata las bacterias comunes que causan el acné. Estos productos suelen ser eficaces, pero si ha estado utilizando productos que contienen peróxido de benzoilo durante un mes o más y sigue teniendo granos que no desaparecen, puede ser el momento de probar otro producto contra el acné. La Academia Americana de Dermatología recomienda añadir un producto con un ingrediente activo diferente. Por lo tanto, si el acné sigue siendo un problema a pesar del uso regular de peróxido de benzoilo, considere la posibilidad de comprar y utilizar una crema que contenga ácido salicílico o retinol. El aceite de árbol de té es otra opción.
Da a los nuevos tratamientos al menos cuatro semanas para que funcionen antes de probar un régimen diferente.
Si tienes un grano especialmente grande y doloroso, puedes aplicar hielo en la zona para reducir la hinchazón y las molestias. No dejes el hielo sobre la piel durante más de 10 minutos seguidos. Si el grano está a punto de estallar -si puede ver una «cabeza» blanca o amarillenta en su centro- puede aplicar una compresa caliente. (Puede utilizar un paño húmedo y caliente.) El calor puede hacer que los restos del interior del grano salgan a la superficie de la piel. Puede aplicar un tratamiento para el acné de venta libre en la zona después de secar la piel.
También es una buena idea lavar regularmente todas las fundas de almohada, sombreros, bufandas y máscaras que toquen su cara. Las telas pueden retener aceites faciales, suciedad y bacterias, y exacerbar el acné.
Tratamiento profesional para el acné crónico
Si tu acné sigue siendo problemático a pesar del tratamiento casero, consulta a un dermatólogo, un médico especializado en el cuidado de la piel. Los dermatólogos pueden recetar pomadas y cremas tópicas más fuertes que las que se venden sin receta. También pueden recetar medicamentos orales para ayudar a eliminar los granos rebeldes.
Los medicamentos que se utilizan habitualmente para tratar el acné rebelde son los antibióticos, las píldoras anticonceptivas (para ayudar a regular los niveles hormonales de las mujeres), la prednisona y la isotretinoína (más conocida como Accutane). Dado que estos medicamentos pueden tener importantes efectos secundarios, es necesario acudir a las consultas médicas con regularidad.
Los dermatólogos también pueden eliminar físicamente los puntos negros, drenar los quistes de gran tamaño y rejuvenecer la piel con exfoliaciones químicas o tratamientos con láser. La fototerapia es otro tratamiento eficaz para el acné en el consultorio.
Puede llevar algo de tiempo y experimentación averiguar qué tratamiento para el acné (o combinación de tratamientos) es más eficaz para usted. Sin embargo, con ayuda profesional, la mayoría de las personas experimentan una mejora significativa y duradera en la salud de su piel y en su aspecto general.