Médicos osteopáticos vs quiroprácticos: Alcance de la práctica
Las principales diferencias entre un médico osteópata y un quiropráctico son sus niveles de formación y el alcance de su práctica. Un quiropráctico no es un médico autorizado y no ha completado la formación de residencia en un hospital. El ámbito de la práctica quiropráctica se define por ley como «el diagnóstico y la localización de vértebras desalineadas o desplazadas y, mediante la manipulación manual y el ajuste de la columna vertebral y otras estructuras del esqueleto, el tratamiento de los trastornos del cuerpo humano». La práctica de la quiropráctica no incluye el uso de fármacos o cirugía, ni la práctica de la osteopatía, la obstetricia o cualquier otra rama de la medicina».
Médicos esteópatas frente a quiroprácticos: Técnicas
La quiropráctica se ocupa principalmente de normalizar la alineación de la columna vertebral para influir en la relación entre la columna vertebral y el sistema nervioso. De este modo, el quiropráctico se esfuerza por influir en la función fisiológica de todos los órganos y sistemas del cuerpo. Aunque sus técnicas se han ampliado un poco en los últimos años para incluir técnicas más suaves, la gran mayoría de los ajustes quiroprácticos siguen siendo de la variedad de empuje.
La Medicina Manipulativa Osteopática se basa en el principio de que el cuerpo humano posee mecanismos de autocuración/autorregulación que son la fuente de la verdadera curación. El osteópata está capacitado para descubrir el plan de tratamiento que estas fuerzas ya han diseñado, en ese momento, específicamente para ese paciente. El enfoque en el tratamiento, por lo tanto, va más allá de la simple alineación de la columna vertebral, para tratar directamente con la fisiología anormal del cuerpo utilizando una serie de técnicas directas e indirectas. Esta perspectiva de atención sanitaria más holística ofrece al osteópata un espectro más amplio de opciones terapéuticas, además de las técnicas de empuje, entre las que se encuentran la liberación miofascial, la energía muscular, el contraesfuerzo, la manipulación visceral, la osteopatía en el campo craneal y la biodinámica.
Esta gama más amplia de opciones diagnósticas y terapéuticas permite al médico osteópata adaptar su plan de tratamiento a las necesidades únicas del paciente, respetando el hecho de que cada uno de nosotros no está destinado necesariamente a tener el mismo aspecto y funcionamiento. Esto también significa que el osteópata no prescribe meses o años de tratamiento en la primera visita, sino que deja que la prescripción se desarrolle a medida que avanza el proceso de tratamiento.