¿Qué es un estudio de difusión de gases?
Un estudio de difusión de gases es una de las diversas pruebas de función pulmonar que ayudan a determinar el funcionamiento de los pulmones. La palabra «pulmonar» significa que tiene que ver con los pulmones. «Difusión» en este caso se refiere a lo bien que los alvéolos, o sacos de aire en los pulmones, están entregando oxígeno y eliminando el dióxido de carbono de la sangre en los capilares (pequeños vasos sanguíneos) que los rodean.
Otros nombres para esta prueba en particular son prueba de difusión pulmonar o capacidad de difusión del pulmón para el monóxido de carbono (DLCO).
¿Cuándo se necesita un estudio de difusión de gases?
Hay varias razones para realizar un estudio de difusión de gases. Puede utilizarse para:
- Descubrir el motivo de los problemas respiratorios de un paciente, como la falta de aire u otros síntomas relacionados con los pulmones, como la opresión o el dolor en el pecho; los ataques de tos o las sibilancias, y la incapacidad para caminar o correr al mismo ritmo que otras personas del mismo grupo de edad.
- Ver si existe algún daño pulmonar actual.
- Examinar a una persona con riesgo de padecer una enfermedad pulmonar. Los factores de riesgo incluyen la presencia de asma o alergias; enfermedades cardíacas; tabaquismo; exposición a la tuberculosis y exposición a largo plazo a amianto, humos o condiciones polvorientas.
- Determinar el nivel de riesgo de una persona antes de someterse a una intervención quirúrgica.
- Evaluar el estado de salud antes de comenzar un programa de ejercicio extenuante.
- Medir el efecto de una enfermedad ya conocida en la función pulmonar.
- Proporcionar información sobre la eficacia de un tratamiento actual.
- Ayudar a determinar si una enfermedad existente está mejorando o empeorando.
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