Fotografía aérea, técnica de fotografiar la superficie de la Tierra o características de su atmósfera o hidrosfera con cámaras montadas en aviones, cohetes o satélites en órbita terrestre y otras naves espaciales.
Para la cartografía de las características terrestres, las fotografías aéreas suelen tomarse en series superpuestas desde una aeronave que sigue un patrón de vuelo sistemático a una altitud fija. Cada fotografía representa un área que incluye varios puntos de control, cuyas ubicaciones se determinan mediante técnicas de reconocimiento en tierra. Una técnica conocida como fotogrametría (q.v.), que consiste en la proyección simultánea de las vistas superpuestas, hace posible la preparación de mapas de contorno o modelos tridimensionales de la superficie terrestre que ha sido fotografiada. Gracias a la tecnología de los satélites y a la interpretación de los expertos, se puede acceder a valiosos datos sobre la topografía, la geología, la hidrología, el suelo y la vegetación, la meteorología, las corrientes oceánicas y los recursos pesqueros. Las vistas de los patrones de las nubes obtenidas desde los satélites en órbita son valiosas para las previsiones meteorológicas. La fotografía aérea también tiene aplicaciones vitales para el reconocimiento militar y la recopilación de información.