Gloria Estefan (nacida Gloria María Milagrosa Fajardo García) llegó con su familia a Miami desde Cuba en 1961 y se unió a la creciente comunidad de exiliados que escapaban de la revolución castrista.
Cuando aún estaba en el instituto, conoció a Emilio Estefan, también cubano que había llegado en 1968. Emilio escuchó a Gloria cantar en una boda y le pidió que se uniera a su banda nupcial, los Miami Latin Boys. Se enamoraron y se casaron, y el grupo pasó a llamarse Miami Sound Machine.
Tocaban una fusión de música popular americana -rock and roll, funk y disco-, pero siempre con ritmos cubanos en el centro. «La música que escuchaba era la cubana, la de mi abuela», dice Gloria. «En el colegio cantaba Carole King, James Taylor, Elton John, esa era la gente que me influía, así que viviendo en Miami me resultó muy fácil mezclar la música pop con la cultura cubana»
La banda fue contratada por CBS Records, y los siguientes cinco años los pasaron en agotadoras giras por toda Latinoamérica, agotando las entradas de los locales, promocionando sus discos. Entonces un día Gloria tuvo una epifanía: ¿Por qué no hacer una Conga en inglés? Emilio, que se estaba cansando de las limitaciones del mercado español y de las interminables giras por salas de conciertos y discotecas, aprovechó la idea.
«Demasiado cubano para los americanos y demasiado americano para los cubanos», refunfuñaron los ejecutivos discográficos. «Bien», dijo Gloria «porque eso es lo que somos». En 1985, «Conga» aterrizó en las listas Dance, R&B y Hot 100 de Billboard, todas al mismo tiempo. Fue un éxito monstruoso y lanzó a Gloria Estefan al estrellato internacional, llegando hasta Japón, donde la canción ganó el gran premio en el Festival de Música de Tokio.
También fue una fusión que definiría el pop latino durante décadas. «Nunca perdió la base», dice el productor Sergio George. «Tenía los timbales, el piano… Cumplía con todas esas cosas en una canción de la que se trataba, por la que los latinos se esforzaban. Ese sonido americano, pero que tenía la cultura latina debajo».
«Conga» fue seguida por otros éxitos, «Get on your Feet», «Words Got in the Way» y «Bad Boy». Para la industria musical, fue un despertar. Las ventas de discos latinos se habían contabilizado mayoritariamente en decenas de miles, pero la Miami Sound Machine estaba vendiendo álbumes por millones. Tommy Mottola, el nuevo presidente de Sony Music Entertainment, se dio cuenta. En asociación con los Estefan, Mottola provocaría una explosión de la música latina en Estados Unidos.
En marzo de 1990, Gloria se rompió la espalda en un terrible accidente de autobús de gira. Regresó en marzo de 1991 con una nueva gira mundial y un álbum llamado Into The Light.
En 1993, Emilio Estefan reunió a leyendas de la música latina, como Israel «Cachao» López, inventor del mambo, y a los grandes del jazz Arturo Sandoval y Paquito D’Rivera para un álbum totalmente español, Mi Tierra. Lleno de canciones memorables como «Con los años que me quedan» y «Que siga la tradición», el álbum vendió más de un millón de copias y fue el primer número uno en la lista Billboard Top Latin Albums. Mi Tierra ganó un premio Grammy al mejor álbum tropical latino.
Gloria Estefan ha vendido unos 100 millones de discos en todo el mundo, incluidos 31,5 millones sólo en Estados Unidos. Ha ganado siete premios Grammy y también ha recibido una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood y en el Paseo de la Fama de Las Vegas. En 2015, el presidente Barak Obama le concedió la Medalla Presidencial de la Libertad por su contribución a la música estadounidense. Estefan también ganó un MTV Video Music Award, y dos ACE Awards. Fue galardonada con el premio American Music Award for Lifetime Achievement y fue nombrada compositora del año por BMI. Fue incluida en el Salón de la Fama de los Compositores y ha recibido múltiples premios Billboard. También está en la lista de los 100 mejores artistas de todos los tiempos de VH1, y en la de los 100 mejores artistas de todos los tiempos de Billboard.
Un musical de jukebox, On Your Feet!, sobre la vida de Gloria y Emilio Estefan se estrenó en Broadway el 5 de noviembre de 2015.
Gloria y Emilio Estefan viven en Miami y tienen dos hijos adultos, ambos activos en la industria del entretenimiento.