CARS.COM – Cuando se trata de frenos, no hay vibraciones buenas. La razón más probable por la que sientes vibraciones a través del pedal de freno es porque un rotor de freno -el disco giratorio contra el que las pastillas de freno son presionadas por las pinzas para frenar la rueda- está desgastado de forma desigual, o lo que algunos llaman «alabeado». (Es poco probable que un rotor pueda estar realmente alabeado por el uso normal y no por un defecto de fabricación, pero las secciones más finas y más gruesas -desgaste desigual- tienen el mismo efecto que el alabeo y pueden hacer que el rotor vibre o se agite.)
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La vibración de los frenos, o lo que también se puede denominar como sacudida o pulsación, suele ser el resultado de que algunas partes del rotor del freno de disco son más finas que otras en lugar de ser uniformes en todo su contorno. Al aplicar los frenos, las pastillas de freno serán presionadas por las pinzas contra puntos altos y bajos que el conductor siente a través del pedal o el volante. El óxido y la suciedad también pueden acumularse en un rotor y causar pequeñas vibraciones en el vehículo.
El grosor de un rotor tiene que variar sólo unas milésimas de pulgada para que el conductor sienta la vibración a través del pedal de freno o el volante. En los casos más graves de rotores deformados, todo el vehículo puede temblar o la dirección tirar cuando el conductor pisa los frenos.
Una de las causas de los rotores deformados es que las pastillas de freno, el material de fricción que se presiona contra los rotores, no son liberadas completamente por las pinzas cuando se retira el pie del pedal y causan fricción cuando la rueda gira. Si las pastillas del vehículo «arrastran» en los rotores demasiado tiempo, el rotor de freno y/o las pastillas pueden dañarse.
En algunos casos, los rotores alabeados pueden ser repasados (mecanizados) en un torno de freno para crear un acabado liso y uniforme del rotor, para detener el temblor siempre que quede suficiente grosor en el rotor. El rectificado de los rotores para hacerlos lisos requiere raspar la capa superior de metal. Si el grosor del disco ya se ha agotado, el disco debe sustituirse por uno nuevo para solucionar la vibración de los frenos.
En lugar de frenos de disco con rotores delanteros y traseros, las ruedas traseras de algunos vehículos siguen teniendo frenos de tambor en los que las zapatas de freno (esencialmente pastillas de freno curvadas) se presionan hacia fuera contra las paredes del tambor para frenar la rueda. Los tambores también pueden desgastarse de forma irregular y vibrar. Esas vibraciones o sacudidas del vehículo podrían solucionarse mecanizando la superficie de frenado.