¿Cuáles son los riesgos de la cirugía de los senos paranasales?Hay que subrayar, que las cosas que se enumeran a continuación son raras, y que si se habló de la cirugía, sus posibles beneficios de la cirugía superan los riesgos.
La cirugía, como todo en la vida, conlleva algunos riesgos. Su cirujano ha pasado años, incluyendo la formación adicional en cirugía nasal endoscópica, para minimizar estos riesgos. Muchos pacientes se han sometido anteriormente a una cirugía endoscópica de los senos paranasales, y los riesgos de este procedimiento no son diferentes de los anteriores. No obstante, debe conocer los riesgos para poder tomar una decisión informada.
Todas las cirugías conllevan riesgos de hemorragia, infección y dolor. El riesgo de hemorragia aumenta con ciertos medicamentos (consulte las instrucciones preoperatorias). En ocasiones, se produce una hemorragia importante que justifica la finalización anticipada de la intervención. En estos raros casos se considera que, dado que se trata de un procedimiento electivo, los riesgos de una transfusión de sangre y los riesgos de operar con la visualización disminuida debido a la hemorragia hacen necesario detenerlo.
Es muy probable que se le administren antibióticos después del procedimiento para minimizar el riesgo de infección. La duración del tratamiento varía, pero oscila entre 2 y 4 semanas. Sin embargo, en algunos casos se produce una infección a pesar de la terapia antibiótica.
Después de cualquier procedimiento quirúrgico se desarrolla algo de tejido cicatricial, y si esto ocurre puede obstruir los senos que se han abierto. Por este motivo, se realizarán varios desbridamientos postoperatorios en los que se eliminarán los coágulos y el tejido cicatricial. El Dr. Dubin pone rutinariamente paquetes muy pequeños (espaciadores y/o stents) que probablemente no notará que están ahí. Se retirarán en el primer desbridamiento.
Es posible que se produzca alguna hinchazón o hematoma alrededor del ojo después de la cirugía, así como algo de lagrimeo durante la primera semana. Sin embargo, esto es poco frecuente y es excepcionalmente raro que el lagrimeo sea permanente.
Las complicaciones más graves, pero afortunadamente raras, se deben a la proximidad de estructuras importantes a sus senos paranasales. Estas son principalmente el cerebro o los ojos. Los riesgos incluyen la visión doble, la pérdida de visión, las lesiones cerebrales, la fuga de líquido cefalorraquídeo y la meningitis.
En algunos casos es necesario enderezar el tabique en medio de la nariz (septoplastia) para acceder a los senos paranasales y/o aliviar la obstrucción nasal. Este procedimiento conlleva el riesgo adicional de que se produzca un agujero en el tabique que conecte un lado de la nariz con el otro. Es raro que esto ocurra y es aún más raro que cause un problema. En muy raras ocasiones, la septoplastia puede cambiar el aspecto de la nariz o causar un adormecimiento permanente de los dos dientes delanteros. Sin embargo, es habitual que se produzca un adormecimiento temporal en una pequeña zona detrás de los dos dientes delanteros.
Si todavía tiene sentido del olfato, es posible que, en raras ocasiones, éste disminuya o se pierda.
La falta de mejora o el empeoramiento de su enfermedad subyacente, así como la necesidad de un procedimiento adicional son riesgos inherentes a cualquier cirugía.
También existen los riesgos de la anestesia, de los que debe ocuparse el anestesista. Este procedimiento se realiza casi uniformemente bajo anestesia general. Aunque esto es excepcionalmente seguro, conlleva el riesgo de un evento cardíaco (ataque al corazón), un accidente cerebrovascular e incluso la muerte.
Hay que insistir de nuevo en que las cosas enumeradas anteriormente son raras, y que si hemos recomendado la cirugía, es nuestra opinión que sus posibles beneficios de la cirugía superan los riesgos.