Sidney Crosby, (nacido el 7 de agosto de 1987, Cole Harbour, Nueva Escocia, Canadá), jugador canadiense de hockey sobre hielo que en 2007 se convirtió en el capitán más joven de un equipo de la Liga Nacional de Hockey (NHL) y que llevó a los Pittsburgh Penguins a tres campeonatos de la Copa Stanley (2009, 2016 y 2017).
Crosby, hijo de un portero reclutado por los Montreal Canadiens, ya sabía patinar a los tres años. En su segundo año de instituto en Faribault, Minnesota, marcó 72 goles y dio 90 asistencias en 57 partidos. Esta hazaña llamó la atención de la leyenda del hockey sobre hielo Wayne Gretzky, quien especuló que sus propios récords serían superados algún día por Crosby. En 2003, el Rimouski Océanic, un equipo de la Major Junior Hockey League de Quebec, fichó a Crosby, que llegó a marcar 120 goles y dar 183 asistencias en 121 partidos de la temporada regular durante dos años. Cada año fue nombrado mejor jugador junior de Canadá. También se incorporó al equipo nacional de hockey juvenil de Canadá y se convirtió en el jugador más joven en marcar un gol con la selección nacional.
En 2005, los Penguins eligieron a Crosby, de 18 años, como la mejor opción en el draft de la NHL de ese año. Las expectativas eran altas para el joven jugador, que atrajo numerosas comparaciones con Gretzky (Crosby fue apodado «The Next One», una variación del apodo de Gretzky «The Great One»). Al final de su primera temporada (2005-06), Crosby se había convertido en el jugador más joven de la NHL en anotar al menos 100 puntos (goles más asistencias) en una sola temporada.
En la segunda temporada de Crosby se batieron más récords. Por anotar 120 puntos en 79 partidos, ganó el Trofeo Art Ross, convirtiéndose en su receptor más joven. Fue el jugador más joven desde Gretzky (en 1980) en registrar un partido de seis puntos, y se convirtió en el segundo jugador más joven de la historia (de nuevo por detrás de Gretzky) en recibir el Trofeo Hart, como jugador más valioso de la NHL. Crosby fue nombrado capitán de los Penguins en 2007, convirtiéndose en el capitán más joven de la historia de la NHL. Durante la temporada 2007-08, Crosby ayudó a llevar a los Penguins a las finales de la Copa Stanley, aunque el equipo perdió ante los Detroit Red Wings en seis partidos. Al año siguiente, Crosby terminó tercero en la NHL con 103 puntos; los Penguins volvieron a llegar a la final contra los Red Wings, esta vez ganando el campeonato en siete partidos.
En 2011 su carrera estuvo a punto de llegar a un final prematuro cuando sufrió una conmoción cerebral tras un golpe en el hielo en enero. Crosby se perdió el resto de la temporada 2010-11 de la NHL, y se especuló con la posibilidad de que los problemas postconmocionales le impidieran volver al hockey. Tras una prolongada rehabilitación, Crosby se reincorporó a la alineación de los Penguins en noviembre de 2011, pero sólo jugó dos semanas antes de quedar de nuevo fuera de juego por una reaparición de síntomas similares a los de una conmoción cerebral. Regresó en marzo de 2012. Su publicitada lesión dio lugar a un mayor debate público sobre la seguridad de los jugadores en la NHL, y a una agitación para mejorarla.
Crosby se perdió 12 partidos de la temporada 2012-13 de la NHL, acortada por el lockout, debido a una fractura de mandíbula, y aun así consiguió liderar la liga con 1,56 puntos por partido. Sin embargo, los Penguins, primeros clasificados, fueron barridos de la siguiente postemporada por los Bruins de Boston en las finales de la conferencia, una serie en la que Crosby no anotó ningún punto. Ganó el segundo Trofeo Art Ross de su carrera por liderar la NHL en puntos (104) durante la temporada 2013-14, una hazaña que también le valió un segundo Trofeo Hart. Sin embargo, sus problemas de anotación en la postemporada continuaron, ya que anotó un solo gol y ocho asistencias en 13 partidos de los playoffs, mientras que los Penguins cayeron en las semifinales de conferencia. Crosby sumó 84 puntos en 2014-15 -el total más bajo de su carrera en una temporada no acortada por lesiones o problemas laborales- pero aún así se las arregló para liderar la NHL con 1,09 puntos por partido. Sin embargo, los Penguins volvieron a tener una temporada decepcionante, ya que el equipo, cargado de talento, apenas se clasificó para los playoffs y fue rápidamente eliminado en la primera ronda.
Crosby ayudó a los Penguins a volver a la parte alta de la NHL en 2015-16 al anotar 85 puntos en el transcurso de la temporada regular. A continuación, sumó 19 puntos en 24 partidos de postemporada mientras lideraba a los Penguins a su segunda victoria en la Copa Stanley de su capitanía, ganando el Trofeo Conn Smythe como el jugador más valioso de la postemporada por sus esfuerzos. Crosby lideró la NHL en goles anotados (44) durante la temporada 2016-17, mientras los Penguins registraban el segundo mejor récord de la liga. En la siguiente postemporada ayudó a Pittsburgh a avanzar de nuevo a las finales de la Copa Stanley, donde el equipo se enfrentó a los Nashville Predators. Los Penguins derrotaron a los Predators en seis partidos, y Crosby -que había marcado ocho goles y dado 19 asistencias en el transcurso de los playoffs- ganó un segundo Trofeo Conn Smythe consecutivo. Crosby mantuvo a los Penguins entre los mejores equipos de la NHL durante la temporada 2017-18, pero la racha de victorias de la franquicia en la Copa Stanley terminó con una derrota en la segunda ronda de los playoffs. Continuó con su excelente juego individual en 2018-19, anotando 100 puntos durante la temporada, pero los Penguins fueron barridos en la primera ronda de los playoffs.
Además de sus logros en la NHL, Crosby fue un miembro clave del equipo de hockey masculino de Canadá en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2010 en Vancouver. Canadá se hizo con la medalla de oro gracias a que Crosby marcó el gol de la victoria en la prórroga de la final contra Estados Unidos. Añadió una segunda medalla de oro olímpica en los Juegos de Invierno de 2014 en Sochi, Rusia.