El Addax, a veces llamado «antílope de cuerno de tornillo», debido a sus cuernos retorcidos, es un gran miembro de la familia de los antílopes que habita en el desierto, estrechamente relacionado con el Oryx.
El Addax es un mamífero en peligro crítico de extinción que se encuentra en varias áreas aisladas en el desierto del Sahara en el norte de África. El Sahara es el mayor desierto cálido del mundo.
El addax es extremadamente raro dentro de su hábitat nativo y con sólo 500 Addax que quedan en la naturaleza, este antílope podría, desafortunadamente, enfrentarse a la extinción.
Descripción del Addax
La longitud de la cabeza y el cuerpo del addax mide entre 150 y 170 centímetros (59,1 – 66,9 pulgadas). Los machos son ligeramente más altos que las hembras y miden entre 105 y 114 centímetros a la altura del hombro, mientras que las hembras miden entre 93 y 108 centímetros a la altura del hombro. Los machos pesan entre 99 y 124 kilogramos y las hembras entre 60 y 125 kilogramos.
El pelaje del addax varía de color según la estación. En invierno su pelaje es de color marrón grisáceo con los cuartos traseros y las patas blancas. Durante el verano, su pelaje se vuelve más claro, casi completamente blanco o de un color beige arenoso que ayuda a mantener la temperatura corporal ya que los colores más claros reflejan más el calor. Tienen mechones de pelo negro/marrón en la cola.
Tanto los machos como las hembras de addax tienen cuernos y una mancha de pelo marrón en la frente que forma una «X» sobre la nariz. Sus cuernos tienen de 2 a 3 vueltas y pueden alcanzar una longitud de 120 centímetros en los machos y 80 centímetros en las hembras. Entre los cuernos hay pelos largos y negros que terminan en una melena corta en el cuello.
El addax tiene patas cortas y gruesas y pezuñas anchas y planas con suelas planas que ayudan a evitar que se hundan en la arena. El addax camina lanzando sus pies de pezuña ancha hacia los lados para evitar el roce con la extremidad opuesta, pero coloca un pie detrás del otro, dejando una sola línea de huellas. El animal corre en un galope plano y parece tener las rodillas rígidas, debido a la mínima flexión de las patas mientras corre. Se le considera uno de los corredores más lentos de los antílopes, lo que tal vez refleje su adaptación a los terrenos arenosos.
El addax se diferencia de otras especies de antílopes por tener unos dientes grandes y cuadrados (como los de las vacas) y por carecer de las típicas glándulas faciales.
Hábitat del addax
El addax prefiere los terrenos desérticos arenosos y los desiertos pedregosos, semidesérticos y estepas secas. Los addax descansan durante el día en profundas depresiones excavadas en la arena, a menudo situadas cerca de grandes rocas para protegerse del viento y del sol abrasador.
Dieta de los addax
Los addax son herbívoros y su dieta consiste en suculentas del desierto, hojas, hierbas Aristida, hierbas, plantas perennes y pequeños arbustos (si están disponibles). También se alimentan de la hierba Parnicum, de la que sólo comerán los brotes interiores y las semillas y no tendrán en cuenta las hojas secas exteriores. Estas semillas proporcionan la proteína adecuada en la dieta del addax. Los addax pueden sobrevivir sin agua, ya que su sed se satisface con la humedad que obtienen de las plantas de su dieta.
Comportamiento de los addax
Los addax son animales nocturnos y están adaptados a las condiciones extremas del desierto. Algunos addax son capaces de vivir lejos unos de otros en su hábitat, pero esto no les causa ningún problema porque tienen habilidades sensoriales sobredesarrolladas que les permiten detectar y localizar a los demás a grandes distancias. Los addax también pueden seguir el rastro de las lluvias y se dirigen a las zonas lluviosas donde la vegetación es más abundante. Algunos addax viven en manadas que contienen entre 5 y 20 individuos, tanto machos como hembras. Las manadas suelen permanecer en un mismo lugar, pero pueden vagar en busca de alimento. Las manadas suelen estar dirigidas por el macho dominante de mayor edad.
Reproducción de los addax
Los addax machos alcanzan la madurez sexual a los 3 años, mientras que las hembras maduran mucho antes, al año y medio. Tras un periodo de gestación de 257 a 264 días (8 a 9 meses), las hembras dan a luz a una cría que pesa entre 4,7 y 6,75 kilogramos. El joven addax permanece escondido durante unas 6 semanas y es amamantado de 2 a 3 veces al día por su madre. Los jóvenes addax tienen un pelaje de color canela con marcas muy tenues o sin ellas. La vida del addax es de unos 19 años.
Estado de conservación del addax
El addax está clasificado como «en peligro crítico» por la UICN. Los addax están casi extinguidos en la naturaleza, ya que han sido eliminados de gran parte de su área de distribución original. Los agricultores han destruido muchos de ellos para que el ganado no tenga que competir por los pastos. Sólo quedan unos pocos centenares en estado salvaje. La caza excesiva por sus cuernos, su carne y su piel parece ser la principal causa del declive del addax. La buena noticia es que hay más de 1.000 addax en cautividad en Estados Unidos, Europa y Oriente Medio. Al parecer, hay 600 addax gestionados en programas de cría en cautividad, por lo que, con los continuos esfuerzos de conservación, el futuro de este increíble animal puede ser un éxito.