La mayoría de nosotros nos encogimos, lloramos y luchamos cuando nos obligaron a comer karela cuando éramos niños. Que nos dijeran que era buena para nosotros no supuso ni un ápice de diferencia. En todo caso, los niños obstinados se resistieron aún más. Pero ahora que somos mayores y luchamos contra las enfermedades del estilo de vida y los trastornos modernos, ya es hora de que nos reconciliemos con la calabaza amarga y la adoptemos en nuestra dieta. Sus beneficios para la salud son exactamente lo que necesitamos hoy en día.
Los expertos en salud de Mumbai, la Dra. Roshani Gadge, diabetóloga consultora del Centro de Diabetes Gadge de Mumbai, y Jaee Khamkar, dietista del Hospital Fortis, comparten todo lo que hay que saber sobre la calabaza amarga:
Alta nutrición
La calabaza amarga es una rica fuente de vitaminas y minerales. Contiene hierro, magnesio, potasio y vitaminas como la A y la C. Contiene el doble de calcio que las espinacas y el betacaroteno del brócoli. La calabaza amarga contiene varios antioxidantes y compuestos antiinflamatorios.
También ayuda a reducir los niveles de colesterol malo, lo que disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Y eso no es todo. Fortalece el sistema inmunitario, mejora la salud respiratoria, potencia la salud de la piel y contiene propiedades antienvejecimiento.
Estupendo para los diabéticos
La calabaza amarga contiene polipéptido, un compuesto similar a la insulina llamado y charantina, que tiene propiedades antidiabéticas. Estos componentes ayudan activamente a reducir los niveles de azúcar en la sangre. También ayuda a prevenir los picos y caídas imprevisibles de los niveles de insulina, regulando el metabolismo y el uso del azúcar que el cuerpo ha consumido. La calabaza amarga actúa como agente hipoglucemiante. Es una rica fuente de fibra soluble y tiene un bajo índice glucémico, lo que ayuda a reducir el nivel de azúcar en sangre.
Ayuda a la digestión
Es una excelente fuente de fibra dietética. El consumo regular de calabaza amarga contribuye a aliviar el estreñimiento y la indigestión. Favorece la salud de las bacterias intestinales, lo que favorece la digestión y la absorción de nutrientes.
Potencia la pérdida de peso
La calabaza amarga es baja en calorías, grasas e hidratos de carbono. Todas estas propiedades ayudan a controlar el peso. Te mantiene saciado durante más tiempo, por lo que evitas comer en exceso. Estimula el hígado para que segregue ácidos biliares que son esenciales para metabolizar la grasa en el cuerpo. Además, la calabaza amarga contiene entre un 80 y un 85% de agua, que es un supresor universal del hambre. También mejora el metabolismo.
Cómo consumir la calabaza amarga
La calabaza amarga se puede consumir en forma de verdura, zumo, o se puede hacer en batido añadiéndole manzanas y espinacas. También se puede tomar como sopa, en forma de patatas fritas al horno, hacer parathas con ella y convertirla en chutney y encurtido.
Cómo hacer que la calabaza amarga sea menos amarga:
* Espolvorear sal por todos los trozos de calabaza amarga y dejarla reposar durante unos 10 minutos. Esto minimizará el sabor amargo de la calabaza haciéndola más apetecible.
* Sumérjala en jugo de tamarindo durante unos minutos.
* Hierva partes iguales de azúcar y vinagre. Verter esta mezcla sobre la calabaza amarga y dejarla en remojo durante algún tiempo.
* Saltearla en aceite de oliva.