5 principales contaminantes del aire exterior que debe conocer

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Tomamos 23.000 respiraciones cada día. En casa. En la oficina. En el coche. En el viaje al trabajo. Son muchas respiraciones.

Para la mayoría de nosotros, respirar es algo en lo que no pensamos porque no es algo que podamos ver. Cuando no puedes ver los contaminantes, como los gases o las partículas invisibles, es difícil saber qué hay en el aire que te rodea.

Lo que la mayoría de la gente no sabe es que la Organización Mundial de la Salud estima que más del 90% de la población mundial respira aire inseguro. Esta impactante estadística afecta a todo el mundo, especialmente a los niños, los ancianos y los asmáticos.

Así que, teniendo esto en cuenta, ¿qué estamos respirando exactamente cuando salimos a la calle?

¿Cuáles son los principales contaminantes del aire exterior?

Cada zona urbana tiene su propio conjunto de métodos y ratios para medir los «cócteles» de contaminación, pero más o menos están midiendo los mismos contaminantes. En este post, conocerás cinco de los principales contaminantes del aire exterior a los que probablemente estés expuesto en la ciudad y cómo son peligrosos para nuestra salud.

5 principales contaminantes del aire exterior

  1. Ozono (O3)
  2. Óxidos de nitrógeno (NOx)
  3. Monóxido de carbono (CO)
  4. Dióxido de azufre (SO2)
  5. Materia particulada (PM10 y PM2.5)

1. Ozono (O3)

Los humos al pasar por el mecánico o una imprenta no sólo son malos de inhalar, sino que también contribuyen al smog que vemos en nuestras ciudades. El ozono a nivel del suelo (también conocido como el ozono «malo») se crea por una reacción química en presencia de la luz solar que se forma entre los COVs artificiales y los óxidos de nitrógeno. Esto explica por qué los niveles de ozono tienden a ser más altos -y, por tanto, más peligrosos- en verano.

Donde se encuentra: El ozono a nivel del suelo procede de productos químicos industriales nocivos y de la quema de combustibles.

Oxidos de nitrógeno (NOx)

Otro tipo peligroso de contaminación del aire urbano es un grupo de gases conocidos como óxidos de nitrógeno. Son altamente reactivos e inodoros. Reaccionan en el aire para formar partículas (PM) y ozono.

Donde se encuentran: Las principales fuentes de óxidos de nitrógeno son los vehículos, las centrales eléctricas y otras formas de quema de combustible.

3. Monóxido de carbono (CO)

El monóxido de carbono es incoloro e inodoro, pero muy tóxico. Aunque a menudo se considera un peligro en interiores, también es una de las principales fuentes de contaminación del aire exterior.

Donde se encuentra: Las fuentes exteriores de monóxido de carbono pueden encontrarse en la quema de combustibles fósiles de los vehículos y la maquinaria pesada.

4. Dióxido de azufre (SO2)

Si alguna vez camina junto a una carretera con mucho tráfico, es posible que pase un camión o un autobús grande y le deje una nube de escape acre. Esa nube procede de la combustión de gasóleo y contiene dióxido de azufre, que forma parte de un grupo de gases altamente reactivos conocidos como óxidos de azufre. Estos gases reaccionan en el aire para formar partículas y, en grandes concentraciones, dan lugar a la niebla tóxica.

Donde se encuentra: Las fuentes significativas de SO2 incluyen la quema de combustible de las industrias y las centrales eléctricas, así como los barcos y los vehículos con equipos pesados. Los volcanes también son una fuente natural de emisiones de SO2.

Materia particulada (PM10 y PM2.5)

Viviendo en una ciudad, es probable que haya caminado fuera de su apartamento y haya notado una capa de neblina gris que le impide ver claramente el paisaje a kilómetros de distancia. Esa neblina aparece cuando hay altas concentraciones de partículas (PM) en el aire.

Las PM son una mezcla de sólidos o gotas líquidas en el aire que se clasifican por tamaño:

  • PM10: Partículas inhalables que tienen un diámetro inferior o igual a 10 micrómetros. Algunos ejemplos son el polvo, el polen y el moho.
  • PM2.5: Partículas finas que tienen un diámetro inferior o igual a 2,5 micrómetros. Para poner esto en perspectiva, son aproximadamente 1/30 de una hebra de cabello humano (demasiado pequeñas para que el ojo humano las vea).

Donde se encuentran: La respuesta simple es, de una variedad de lugares incluyendo fuentes naturales y artificiales. Las PM pueden ser emitidas al aire directamente o formarse en la atmósfera con una mezcla de otros contaminantes. Los entornos urbanos, como las obras de construcción, las chimeneas, los incendios y las carreteras sin asfaltar, emiten directamente partículas más gruesas, como el polvo arrastrado por el viento, la suciedad, el humo y el hollín. Estas partículas suelen ser más grandes y oscuras, por lo que son más visibles para el ojo humano.

Efectos en la salud de la contaminación del aire exterior

Casi el 40% de los casos de asma infantil se atribuyen a la contaminación del aire.

Las emisiones de las centrales eléctricas, los automóviles y otras industrias urbanas se combinan para crear reacciones químicas que tienen graves efectos sobre la salud. La exposición a los contaminantes atmosféricos urbanos, especialmente las PM y el ozono, tiene graves efectos sobre la salud. Debido a su tamaño, las PM permanecen en el aire, provocando una contaminación que acaba entrando en el organismo. Las PM2.5, en particular, pueden entrar en el torrente sanguíneo y llevar los contaminantes a los órganos.

La contaminación del aire afecta a todo el mundo (especialmente a los considerados de alto riesgo, como los niños, los ancianos y los asmáticos).

La exposición a corto plazo a los contaminantes del aire exterior puede causar:

  • Asma agravada
  • Latidos irregulares
  • Síntomas respiratorios como tos, sibilancias o dificultad para respirar

La exposición a largo plazo a los contaminantes del aire exterior puede causar:

  • Desarrollo de asma
  • Infartos no mortales
  • Disminución de la función pulmonar
  • Infecciones respiratorias
  • Muerte prematura en personas con enfermedades cardíacas o pulmonares

Cómo protegerse de los contaminantes del exterior

Hay soluciones sencillas que pueden proteger eficazmente contra estos contaminantes urbanos invisibles. Por ejemplo, cuando esté al aire libre en un día de cielo gris, es importante:

  • Minimizar la actividad al aire libre
  • Seguir las lecturas de la calidad del aire
  • Utilizar una máscara anticontaminación bien ajustada que bloquee el 95% o más de las partículas

Un paso importante que puede dar para proteger su aire es conocer la calidad del aire que le rodea. Esto incluye encontrar la estación local de calidad del aire y comprobar regularmente sus lecturas del índice de calidad del aire (ICA) antes de salir de casa.

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