Historia de la presa de Hoover

El proyecto necesitaba grandes recursos de mano de obra (unos 5.000 trabajadores). Para alojar a los trabajadores, se construyó una comunidad entera, Boulder City, en la fase inicial de los trabajos de construcción de la presa. Como el periodo de construcción coincidió con la Gran Depresión estadounidense (1929-1933), muchos trabajadores desempleados ya se habían trasladado al lugar de la presa junto con sus familias en busca de una oportunidad laboral.

Construcción de la presa

En 1931, la primera fase del proyecto se inició con la voladura de las paredes rocosas del cañón para construir túneles hidráulicos que se utilizarían para desviar temporalmente el caudal del río Colorado hasta que se completara la presa. El calendario del proyecto era estricto y los obreros tuvieron que trabajar en condiciones extremas (altas temperaturas y peligrosas concentraciones de monóxido de carbono, ya que no había una ventilación adecuada) para completar las excavaciones de los túneles. La situación llevó a una huelga de 6 días en agosto de 1931.

Para crear un desvío permanente, se excavaron 4 túneles (dos en el lado de Nevada y dos en Arizona). El río Colorado fue desviado en noviembre de 1932 utilizando los dos túneles del lado de Arizona, mientras que los otros 2 sirvieron como estructuras de reserva en caso de inundación. Esto fue posible gracias al establecimiento de una ataguía temporal más pequeña construida con los restos de roca procedentes de la excavación de los túneles.

Figura 2: Excavación de túneles a través del Cañón Negro (Fuente: Bechtel)

Para proteger el equipo y las personas que trabajaban en el lugar de las inundaciones, se construyó otra ataguía. Una vez drenada la zona, se iniciaron los trabajos de cimentación de la presa. La instalación se cimentaría sobre roca volcánica sólida, por lo que los contratistas tuvieron que retirar las capas superiores de material suelto del suelo. Los cimientos de la presa se reforzaron con un líquido que se utiliza en los proyectos de construcción para rellenar las cavidades, conocido como lechada.

Se establecieron plantas de producción de hormigón en la obra. El vertido de hormigón comenzó en el verano de 1933. Surgió un gran problema relacionado con la enormidad de la presa. Se descubrió que si el hormigón se vertía en una sola etapa, los resultados serían catastróficos para la presa. Cuando el hormigón se cura, su temperatura tiende a aumentar, lo que provoca su contracción. Si este proceso se produce de forma desigual en toda la masa de hormigón de la presa, se produciría el inicio y la propagación de grietas. Los ingenieros del Bureau of Reclamation estimaron que, en ese caso, el proceso de curado podría durar más de 100 años.

Por ello, la estructura se construyó de forma incremental en segmentos utilizando bloques de hormigón entrelazados. El proceso de curado se aceleró con la instalación de tuberías de agua a través de los bloques de hormigón que posteriormente se rellenaron con lechada.

Figura 3: Obras de construcción de la presa Hoover (Fuente: Bechtel)

Las obras finalizaron en la primavera de 1935, después de verter unos 2,5 millones de m3 de hormigón.

Los aliviaderos de la presa Hoover

Los aliviaderos de la presa proporcionan un paso para el agua en caso de desbordamiento. Se establecen en las partes superiores de las presas y se activan cuando el nivel del agua es demasiado alto. Por lo tanto, impiden que el agua desborde la presa.

En la presa Hoover hay dos aliviaderos, situados a ambos lados de los estribos, a unos 8 metros por debajo de la parte superior de la estructura. El exceso de agua que pasa por el aliviadero, se dirige río abajo a través de túneles de 15 metros de ancho que están conectados con los túneles de desviación de la cuenca. Cada uno de los aliviaderos puede transportar más de 5500 m3 de agua por segundo, el caudal equivalente al de las cataratas del Niágara.

El primer aliviadero comenzó a funcionar en el verano de 1941, tras alcanzar el lago Mead su nivel máximo.

Los aliviaderos fueron muy utilizados en 1983, cuando la cuenca alcanzó cotas de agua récord. Los flujos de agua dañaron la base de hormigón de la presa, que tuvo que ser reparada.

Figura 4: Aliviadero de la presa Hoover (Fuente: Universidad Estatal de Pensilvania)

Central eléctrica de Hoover

La central eléctrica de Hoover se estableció junto con la presa de arco de gravedad y está situada en la base de la instalación. Los primeros 3 generadores empezaron a funcionar a finales de 1936 y en los años siguientes le siguieron más.

La presa Hoover fue la mayor instalación hidroeléctrica de Estados Unidos durante 10 años (1939-1949), y sigue siendo una de las centrales más potentes. En la actualidad, produce unos 4.000 millones de kWh anuales con una capacidad máxima de 2.080 MW. Su rendimiento había decaído durante la última década debido a un periodo de sequía constante que afectó a los niveles de agua del lago Mead, que experimentó su nivel más bajo en 2016. Sin embargo, la situación se ha revertido en los últimos años.

Las últimas unidades generadoras de la presa se instalaron en 1961. Actualmente, cuenta con 17 turbinas principales que sustituyeron a las originales en las décadas de 1980 y 1990. La central eléctrica sigue siendo operada por la Oficina de Reclamación de los Estados Unidos.

Haga un recorrido por la central eléctrica de la presa Hoover viendo el vídeo que aparece a continuación.

La presa Hoover como monumento y atracción turística

La presa Hoover es actualmente un popular destino turístico, que recibe alrededor de 1 millón de turistas al año. En 2005, al aumentar el número de visitantes y de viajeros entre los estados de Arizona y Nevada, surgieron problemas de tráfico y las autoridades iniciaron la construcción del Proyecto de Derivación de la Presa Hoover, un puente en arco que conecta los estados de Arizona y Nevada. El puente se establece por encima del río Colorado y cerca de la presa. La antigua carretera es utilizada ahora sólo por los visitantes de la presa.