La gente tiene dos grandes obstáculos con la natación. La primera es encontrar una piscina para nadar que sea conveniente (es difícil ayudarte, pero seguro que tienes un YMCA cerca). La segunda es lo duro que es nadar. Tampoco podemos ayudarte en esto. Aunque sólo 20 minutos en la piscina pueden quemar más de 250 calorías -lo mismo que correr-, la natación es un ejercicio de todo el cuerpo que presenta nuevos retos. «Se involucran todas las fibras musculares, desde el núcleo hasta las extremidades», dice Morgan Mabe, entrenador de natación de Asphalt Green, en Nueva York. No hay ningún otro deporte que sea igual de duro para la parte superior y la inferior del cuerpo y que sea suave para las articulaciones. Y no sólo eso: «El aspecto anaeróbico de este deporte eleva instantáneamente tu ritmo cardíaco, ya que estimula la hipertrofia, es decir, el crecimiento muscular». Si eres un nadador ocasional, empieza por centrarte en la técnica. Independientemente de tu nivel, los secretos de los profesionales pueden hacer que la experiencia sea más agradable. Ahora bien, en eso podemos ayudarte.
Como ya hemos establecido, impulsarse en el agua es difícil. Así que unos cuantos consejos de los expertos en la materia no te vendrán mal.
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