Terminología actualEditar
Trastorno de sadismo sexual es el término empleado por la versión actual del Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM-5) de la Asociación Americana de Psiquiatría. Se refiere a la «excitación sexual intensa y recurrente por el sufrimiento físico o psicológico de otra persona, que se manifiesta mediante fantasías, impulsos o comportamientos» (p. 696). Se clasifica como una de las parafilias, denominada «trastorno algolágico» (p. 685), que forma parte de las «preferencias de actividad anómala» (p. 685). El diagnóstico formal de trastorno de sadismo sexual se aplicaría si el individuo ha actuado según estos impulsos con una persona no consentidora o si los impulsos causan una angustia significativa al individuo.
El sadomasoquismo aparece en la versión actual de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10) de la Organización Mundial de la Salud. Se refiere a la «preferencia por la actividad sexual que implica esclavitud o la imposición de dolor o humillación» (p. 172), y divide el sadomasoquismo en sadismo y masoquismo según si el individuo prefiere ser el proveedor o el receptor del mismo. La CIE-10 especifica que las formas leves de sadomasoquismo «se utilizan comúnmente para mejorar la actividad sexual que de otro modo sería normal» (p. 172), y que el diagnóstico se aplicaría sólo si el comportamiento es preferido o requerido para la gratificación sexual. La condición se clasifica como uno de los trastornos de la preferencia sexual, que incluye las parafilias (p. 170).
El trastorno coercitivo parafílico se refiere a la preferencia por parejas sexuales no consentidas sobre las consentidas. Se diferencia del trastorno de sadismo sexual en que, aunque el individuo con este trastorno puede infligir dolor o amenazas de dolor para obtener la conformidad de la víctima, la inflicción de dolor no es el objetivo real del individuo. Este trastorno suele describirse como una parafilia y sigue siendo objeto de investigación, pero no aparece en el actual DSM o CIE. Entre los términos alternativos para esta afección se incluyen Biastofilia, Trastorno Parafílico Coercitivo y Violación Preferencial.
BDSM o «sadomasoquismo de dominación/sumisión bondage/disciplina» es un término coloquial que hace referencia a la subcultura de individuos que participan voluntariamente en formas consentidas de dolor o humillación leve o simulada. Actualmente no es una condición diagnosticable ni en el sistema DSM ni en el CIE. Entre los términos alternativos se encuentran Bondage y Disciplina (B&D), Dominación y Sumisión (D&S) y Sadismo y Masoquismo (S&M). En la investigación científica, esta preferencia sexual también se ha denominado patrón de comportamiento sexual hiperdominante. A diferencia de los individuos con trastorno de sadismo sexual o trastorno coercitivo parafílico, los individuos con hiperdominancia buscan provocar placer en su(s) pareja(s) con el dolor/humillación.
Terminología anteriorEditar
Sadismo sexual es el término empleado anteriormente por el DSM-III-R, DSM-IV y DSM-IV-TR, donde se clasificaba como una parafilia. En estas versiones del DSM, el sadismo sexual se refería únicamente a la imposición de sufrimiento real (no simulado) (p. 530). El trastorno pasó a llamarse trastorno de sadismo sexual en el DSM-5.
Sadismo sexual fue el término empleado en el DSM-III, que clasificó el trastorno como una parafilia. El DSM-III señalaba que «las imágenes de una parafilia, como el bondage simulado, pueden ser juguetonas e inofensivas y llevarse a cabo con una pareja mutuamente consentida….. En una forma más extrema, las imágenes parafílicas se llevan a cabo con una pareja no consentida, y son nocivas y perjudiciales para la pareja» (p. 267). En el DSM-III, el sadismo sexual podría diagnosticarse si:
- la persona inflige repetida e intencionadamente sufrimiento a una persona no consentidora, para experimentar excitación sexual
- repetida o exclusivamente prefiere el sufrimiento simulado o leve con una pareja sexual consentidora
- emplea un sufrimiento extenso, permanente o potencialmente mortal para lograr la excitación sexual, independientemente del consentimiento de la otra persona.
Sadismo fue el término empleado por el DSM-II. En ese manual, la afección se clasificaba como una desviación sexual, que se utilizaba para describir a «individuos cuyos intereses sexuales se dirigen principalmente hacia… el coito realizado en circunstancias extrañas» (p. 44). El término «parafilia» no existía en el DSM-II, y los diagnósticos no tuvieron criterios específicos hasta el DSM-III.
El sadismo sexual era la frase mencionada en el DSM-I como una de las desviaciones sexuales (p. 39), pero ni ésta (ni ninguna de las otras desviaciones sexuales) recibió una etiqueta específica ni criterios de diagnóstico. El término parafilia no existía en el DSM-II, y los diagnósticos no tuvieron criterios específicos hasta el DSM-III.
El trastorno sádico de la personalidad no se refiere en realidad a ningún interés sexual, y en su lugar se refiere al desprecio generalizado por el bienestar de los demás. Suele estar asociado a un historial de violencia y criminalidad (que puede incluir, pero no se limita a los delitos sexuales).