Pregunta: «¿Qué debemos aprender de la mujer virtuosa de Proverbios 31?»
Respuesta: Proverbios es un libro basado en la metáfora. Está repleto de imágenes de palabras de verdades universales. A lo largo de Proverbios, la sabiduría es antropomorfizada como una mujer. Ya en Proverbios 1:20, la sabiduría se compara con una mujer que grita en las calles, reprendiendo a los necios y a los burlones. Proverbios 31 ofrece una metáfora detallada de la sabiduría femenina en el contexto de una familia y una comunidad.
La sección más citada, los versículos 10-31, es un poema quístico, es decir, un poema que recorre pensamientos repetidos en un orden determinado. El capítulo habla de la valía de una buena esposa para su marido, del trabajo manual que realiza, de su cumplimiento de las responsabilidades con los que la necesitan, de su capacidad para mantener a su familia y de su sabiduría para cuidarse a sí misma y poder compartir su fuerza con los demás. Estas ideas se presentan en una especie de patrón circular a lo largo de la sección.
El capítulo comienza con el rey Lemuel relatando un consejo que le había dado su madre. Ella lo exhortó a no caer en debilidades que comprometieran su posición como rey, sino a cuidar de los pobres. Una de las debilidades que mencionó la madre del rey fue la susceptibilidad de su fuerza -o «carácter noble» (31:10)- a ser perjudicada por relaciones inapropiadas con mujeres. Aunque los versículos 10-31 no siguen directamente esta advertencia en el original, ilustran una descripción adecuada de la clase de mujer que Lemuel debería buscar.
10Una esposa excelente, ¿quién puede encontrarla?
Pues su valor está muy por encima de las joyas.
11El corazón de su esposo confía en ella,
Y no le faltará ganancia.
12Ella le hace el bien y no el mal
Todos los días de su vida.
Una esposa buena, solidaria y confiada es una bendición para el hombre. Una mujer que se asocia con su esposo, que es confiable y vela por sus intereses, le da a un hombre una seguridad que hace mucha falta en el mundo. Ella vale más que un sueldo considerable. Para traer la metáfora, la sabiduría proporciona los mismos beneficios: vale más que el dinero, siempre se puede confiar en ella para tomar la decisión correcta, y proporciona bendiciones para aquellos que la tienen.
13Ella busca lana y lino,
Y trabaja con sus manos con deleite…
19Ella extiende sus manos a la rueca,
Y sus manos agarran el huso…
27Ella mira bien los caminos de su casa,
Y no come el pan de la ociosidad.
La esposa de Proverbios 31 no le teme al trabajo. Se levanta por la mañana y hace las cosas. En la época de Salomón, esto implicaba hacer telas y coser ropa, pero el versículo 27 ciertamente se aplica directamente a nosotros hoy: ocuparse de nuestras responsabilidades es una característica de la sabiduría.
15Se levanta también cuando todavía es de noche
Y da comida a su casa
Y raciones a sus doncellas…
21No teme a la nieve por su casa,
Porque toda su casa está vestida de grana.
20Extiende su mano al pobre,
Y extiende sus manos al necesitado.
Otra característica de la sabiduría es la gracia de ayudar a los demás. La esposa de Proverbios 31 se asegura de que los que están bajo su cuidado reciban lo que necesitan: comida, ropa, protección. Y es capaz de servir a los demás por el exceso de su trabajo y la inclinación de su corazón. Ha interiorizado tanto su papel de proveedora que se extiende más allá de sus responsabilidades inmediatas y llega a la comunidad.
14Es como los barcos mercantes;
Trae su comida desde lejos…
16Considera un campo y lo compra;
Con sus ganancias planta una viña…
18Siente que su ganancia es buena;
Su lámpara no se apaga por la noche…
24Hace prendas de lino y las vende,
Y suministra cinturones a los comerciantes.
Más allá de eso, ella es inteligente. Ella es educada sobre el mundo y el mundo de los negocios. Sabe cómo utilizar sus habilidades para mantener a su familia, y no tiene miedo de ir a interactuar con ese mundo, ya sea como un comerciante o un comprador. Sabe cómo utilizar sus puntos fuertes para sacar el máximo provecho, y es plenamente consciente de lo valiosos que son sus esfuerzos.
17Se ciñe con fuerza
Y hace que sus brazos sean fuertes…
22Se hace coberturas para sí misma;
Su ropa es de lino fino y púrpura.
25La fuerza y la dignidad son su vestimenta,
Y sonríe al futuro.
26Abre su boca con sabiduría,
Y la enseñanza de la bondad está en su lengua.
La mujer de Proverbios 31 no sólo conoce su valor, sino que conoce sus responsabilidades para consigo misma. No sería capaz de mantener a los demás si descuidara sus necesidades, tanto físicas como espirituales. Se asegura de que su apariencia refleje su respetada posición como influencia en su comunidad. Su mayor fortaleza es su sabiduría, su juicio certero sobre el mundo y su influencia en él. Y se apresura a compartir la sabiduría que ha adquirido para animar a otros a alcanzar su potencial.
23Su marido es conocido en las puertas,
Cuando se sienta entre los ancianos de la tierra…
28Sus hijos se levantan y la bendicen;
Su marido también, y la alaba, diciendo:
29 «Muchas hijas han actuado noblemente,
pero tú las superas a todas».
30El encanto es engañoso y la belleza es vana,
Pero la mujer que teme a Jehová, será alabada.
31Dale el producto de sus manos,
Y que sus obras la alaben en las puertas.
Ella sabe que, como compañera en su matrimonio, tiene una tremenda influencia en el ministerio de su esposo. Ella puede integrar su vida -tanto doméstica como profesional- con su ministerio de tal manera que su esposo tiene la libertad de servir. De hecho, la reputación de ella está tan establecida, que se derrama sobre él.
La esposa de Proverbios 31 es una feroz proveedora y protectora de aquellos que le importan. Es sabia en los caminos del mundo, pero vive según la sabiduría de Dios. Como en el resto de los Proverbios, estos ejemplos específicos son una metáfora de la verdad más amplia. La forma en que cada mujer ejemplifique estas características dependerá de su situación, sus dones y sus habilidades. La clave está en el versículo 30, al igual que en el comienzo de los Proverbios, en 1:7:
Pero la mujer que teme a Jehová, será alabada.