La edad del universo es de unos 13.750 millones de años. El diámetro del universo observable se estima en unos 28.000 millones de parsecs (93.000 millones de años-luz). Como recordatorio, un año-luz es una unidad de longitud equivalente a algo menos de 10 billones de kilómetros (o unos 6 billones de millas).
El Universo Observable está formado por las galaxias y otra materia que, en principio, podemos observar desde la Tierra en la actualidad, porque la luz (u otras señales) de esos objetos ha tenido tiempo de llegar a la Tierra desde el comienzo de la expansión cosmológica.
La palabra observable utilizada en este sentido no depende de si la tecnología moderna permite realmente detectar la radiación de un objeto en esta región (o, de hecho, de si hay alguna radiación que detectar). Simplemente indica que es posible, en principio, que la luz u otras señales del objeto lleguen a un observador en la Tierra.
Los números son bastante difíciles de comprender incluso cuando se sabe lo que representa cada unidad. Pensar siquiera en la longitud de 10 billones de kilómetros, por no hablar de 93 mil millones de veces esa distancia, puede hacer que te duela el cerebro. Andrew Z. Colvin ha intentado poner en perspectiva parte de este incomprensible tamaño comenzando con nuestro propio planeta y ampliando la escala a partir de ahí.
Para los interesados, las ocho imágenes que aparecen a continuación pueden encontrarse en Wikipedia con una resolución mucho mayor aquí:
http://en.wikipedia.org/wiki/File:Earth%27s_Location_in_the_Universe_(JPEG).jpg