AIDS 2020, la 23ª Conferencia Internacional sobre el SIDA se celebró virtualmente este año debido al distanciamiento social y al coronavirus. Es posible que te hayas perdido algunos de los principales avances en el tratamiento del VIH presentados en la reunión.
El tema más importante fue el aumento de peso en las personas que toman terapia antirretroviral. Un amplio estudio realizado en EE.UU. descubrió que las personas con VIH aumentaban de peso tres veces más rápido que las personas seronegativas de edad similar, independientemente de su peso inicial. Hubo más datos que confirmaban la relación entre el aumento de peso y el medicamento antirretroviral dolutegravir, así como un estudio que mostraba una relación con tenofovir alafenamida (TAF). Las personas que cambiaron de la versión más antigua de tenofovir a TAF experimentaron un rápido aumento de peso, independientemente de los otros medicamentos contra el VIH que estuvieran tomando.
Hubo más datos sobre la seguridad de dolutegravir en el embarazo. La exposición a dolutegravir en torno a la concepción o al principio del embarazo se asoció con una diferencia leve, pero no significativa, en el aumento del riesgo de defectos del tubo neural en comparación con otros antirretrovirales, según los últimos datos. Otro análisis halló diferencias marginales entre dolutegravir y efavirenz en cuanto a los nacimientos prematuros, los partos de niños muertos y las muertes neonatales.
Glosario
Terapia de primera línea
El régimen utilizado cuando se inicia el tratamiento por primera vez.
no significativo
Suele significar «no significativo desde el punto de vista estadístico», lo que significa que la diferencia observada entre dos o más cifras podría haber surgido por azar.
Tratamiento de segunda línea
La segunda terapia preferida para una enfermedad concreta, utilizada después de que falle el tratamiento de primera línea o si una persona no puede tolerar los medicamentos de primera línea.
Hubo relativamente pocas noticias sobre nuevos medicamentos antirretrovirales, con la excepción de un estudio que demostró que el prometedor nuevo agente islatravir combinado con doravirina (Pifeltro) mantuvo la carga viral suprimida durante 48 semanas con sólo un pequeño número de participantes en el estudio que experimentaron un fracaso virológico.
Las directrices de tratamiento para entornos con recursos limitados recomiendan el uso de tenofovir disoproxil fumarato en el tratamiento de primera línea, con regímenes de segunda línea que implican un cambio de tenofovir a zidovudina. Sin embargo, los datos de Haití sugieren que los resultados de quienes «reciclan» el tenofovir son mejores, tal vez porque se evita la dosificación diaria y los efectos secundarios de la zidovudina.
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